miércoles, 23 de noviembre de 2011

CUANDO LLEGA LA NOCHE


“Al romper el día, bandadas de pinzones animan las hojas del inmóvil, inmenso árbol de la bahía, el Laurus nobilis, vibrando con sus rumorosos trinos, con los que abren los coros de la aurora.” (Ronald Bottrall, “Luz alada”)

Cuando al oscurecer el Sol se va y aparece la Luna, en los bosques y jardines las plantas se adormecen.

Las flores recogen sus pétalos que son una cuna para sus semillas, sus hojas toman posturas relajadas y caen lánguidamente, porque las FLORES DUERMEN, las plantas en general toman posturas de reposo, cualquier observador puede ver que a determinadas horas, cuando anochece, entran en una especie de relajación o quietud.

Así podríamos decir que las plantas duermen, haciendo una pausa sus funciones biológicas, su follaje toma posiciones de reposo a causa de reacciones mecánicas en condiciones de humedad o sequía.


El sueño reparador

Se puede observar que las plantas, además de realizar determinados movimientos para negar o permitir el paso a los insectos portadores de polen, también se mueven al llegar la noche, sus movimientos están producidos por hinchazones especiales situados en su base y, a veces, en la base del pecíolo común. Estas hinchazones con función de motor están formadas por tejidos especiales ricos en zumos y tienen apariencia de nudos, si lo observáramos con un microscopio veríamos que el amasijo está formado por células, con una membrana muy delgada y turgente, en medio del amasijo hay un cordoncillo de vasos y fibras no endurecido; este cordoncillo pasa a formar parte de la armadura de las hojas y se hace rígido o leñoso, de forma que hace de bastidor a los tejidos blandos y conduce al mismo tiempo los materiales nutritivo.

El mecanismo sería el de un bastoncito rígido, articulado en uno de los extremos y sometido a la presión de dos masas opuestas de igual fuerza. Si levantamos un poco con un dedo una de ambas masas, el bastoncito ser verá forzado a plegarse por la parte de ésta, ya que disminuye la presión, levantando la otra masa, se produce el fenómeno inverso, mientras que si la presión de las dos masas es la misma, el bastoncito toma su posición habitual.

Las hojas se mantienen erectas cuando la turgencia es igual por ambas partes, pero si por una mayor afluencia de agua aumenta la turgencia en una de las partes de la hinchazón-motor, ésta ejerce una presión sobre la otra parte, que se curva, haciendo que se pliegue asimismo el tallo o la hoja.

Las variaciones de la turgencia de la hinchazón-motor son debidas a la disminución de calor y de luz, así al ponerse el sol, se produce el fenómeno de curvarse las hojas hacia el interior de la planta, lo que hizo pensar en el pasado que las plantas dormían, lo que desde luego hacen es adoptar actitudes diferentes durante las horas nocturnas a su posición durante el día.


En los países tropicales

El paso del día a la noche en estos lugares es muy rápido, las temperaturas descienden repentina y rápidamente y la humedad es muy alta, cuando las plantas tienen “sed” y se deshidratan sus tejidos con el calor del sol, las hojas se tornan mustias, cuando se hidrata la planta de nuevo el follaje vuelve a su posición normal erguida y “espabilada”.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts with Thumbnails